El 16 de abril del años 2016 sucedió un terremoto de 7,8 de magnitud en la ciudad de Manabí Ecuador. Dejo cientos de muertos y miles de heridos.
Muchas familias perdieron sus casas y no tuvieron por varias noches donde guarecerse de la inclemencia del tiempo.
El reporte a los pocos días daban cuenta de más seiscientos muertos, una veintena de desaparecidos y 28.678 personas en condición de hacinamiento.
Unos pocos meses después José Ordóñez y su grupo de trabajo llegó hasta Guayaquil para realizar una maratónica jornada de chistes y, cómo de costumbre recolectar ayudas por los damnificados del terremoto.










